Gracias a la donación de un farmacéutico belga jubilado, recibimos 4000 mascarillas sanitarias que distribuimos en varias comunidades. Bruno Rouffaer (nuestro representante en Lima) se encargó de la distribución de las mascarillas en los barrios marginales. Para muchas personas de las zonas más pobres, conseguir unas mascarillas para protegerse del COVID-19, fue un acontecimiento importante.